¿Quieres convertirte en una muñeca de papel recortable y poder jugar a ponerte y quitarte sus atuendos favoritos, como he hecho con Susana? Pues me lo pides por privado (mejor si es con educación) y lo hablamos. No sólo te convierto en una muñequica de papel, si no que incluyo tus trajes, disfraces y aficiones favoritas; ¡y te lo entrego así de chulo!